lunes, 29 de noviembre de 2010

Rockin around the Christmas tree

26/11/2010
Detesto cuando no cuentas conmigo.
Ya no llamas a la puerta de mi habitación para tener minutos a solas en los que reírnos de la gente o llorar por ella.
Detesto cuando construyes sobre mí maldiciones crececulos, y cuando el “mayúsculas” que tú dices no va dedicado a mí.
Sé que tú también me detestas lo suficiente, pero no importa, porque mañana encienden las luces de navidad en Madrid, y pienso ir a dar una vuelta para poder disfrutar de lo que no detesto, que son pocas cosas.

martes, 23 de noviembre de 2010

Quiero ser como este músico y poeta.

"Si dices que desafino,
amor mío,
que sepas que eso me causa un terrible dolor.
Sólo los privilegiados tienen un oído como el tuyo,
yo apenas posea lo que Dios me dio.
Si insistes en calificar mi comportamiento de antimusical,
yo, aún a riesgo de mentir,
tengo que decir que esto es Bossa Nova.
Lo que tú no sabes, lo que tu no intuyes,
es que los desafiados,
también tienen corazón."


lunes, 22 de noviembre de 2010

Cuando les hablé de colinas me dijeron que tenía que comer almendras


El césped brillaba con cada paso que dábamos en él, como si fuésemos nosotras el astro que emana luz sobre los verdes lomos de la sinuosa colina enfrente de palacio.
Delante nuestra, una doncella que coqueteaba con tres hermanos, franceses todos ellos, y que vestían con chaqueta y pantalón beis de lino. Con cada sonrisa que ella daba, el sol agonizaba la pérdida de un segundo más.

Y la tarde caía entre risa y sonrisa.

Parejas cortesanas paseaban agarradas de la mano por los jardines de palacio y los niños jugueteaban con sus balones y sus perros.
Y la tarde cayó un poquito más, hasta que hubo apagado todas las blancas y diminutas margaritas de la colina y hasta alcanzarme los pies con sus sombras.

Ahora que está todo apagado, yo huelo a frambuesa. Y ahí en la oscuridad diviso las tenues luces de las farolas que iluminan, más que el camino, tu silueta vestida pidiendo a gritos que la desnuden, por favor. El dominio de mi mente no es bastante para que perdures.

[Así fue como el encanto de la tarde murió para dejar paso al encanto de la noche]

lunes, 15 de noviembre de 2010

Muérdeme cuando despierte, por favor.


Nadie me advirtió de que apagara las luces.
En la fulgente habitación me duermo sin disturbio.
Ya nada palia mi sueño: podría dormir a todas horas y en cualquier lugar. Mi mal humor me agota y me fatiga, y estos últimos días he tenido que pagar a un payaso para que me haga reír.

martes, 2 de noviembre de 2010


(31/10/2010)

Tengo los pies fríos, muy fríos, ¡congelados! y no sé si es porque
1.es Halloween y hoy soy una muerta viviente que anda por la casa,
2. porque olvidé ponerme los calcetines de esquí para dormir
3. o porque hoy no he tenido sexo.
A parte de esto último, necesito un té, un trabajo, una cámara que me quiera grabar debido a mi condición narcisista y otro par de calcetines.
El resto, me da igual.